Petición en favor de Ramiro Ibarra, paremos su ejecución del 04/03/2021
Petición al gobernador de Texas en favor de Ramiro Ibarra. Su ejecución está prevista para el 4 de marzo de 2021
Ramiro Ibarra fue condenado a muerte por el atroz homicidio de una adolescente en Waco, por el que lleva encerrado casi 25 años.
Sus defensores afirman que no tuvo un proceso ni una defensa adecuados a la gravedad del caso: Ibarra da muestras de deficiencias mentales. Por otra parte, se le privó de la asistencia consular a la que tenía derecho por ser ciudadano mexicano.
Compartiendo el dolor de quien no puede dejar de sufrir por una muerte cruel, estamos firmemente convencidos de que no puede haber reparación alguna dando muerte a otro ser humano, y en situación de máxima fragilidad. No existe justicia sin vida. No existe justicia si, ante el mayor de los males, no se tienen en cuenta las razones de la misericordia.
Pedimos que quienes pueden decidir la suerte de una vida suspendan la condena y, como sucede cada vez más en todo el mundo, consideren otras medidas alternativas existentes de justicia y clemencia.
Ramiro Ibarra está en contacto epistolar con Alex desde hace más de 20 años, y también con Marielle, Dirk, Peter y otros amigos por carta. Publicamos, sabiendo que le gustaría que lo hiciéramos, un extracto de una carta que escribió recientemente a Alex:
Carta del 14 de enero de 2021
Lo que se vive aquí no es una cosa fácil. Aunque de manera dura, el tiempo dentro de este pequeño infierno me ha enseñado que o se aprende a hacer lo que se puede para sobrevivir en este infierno o terminas volviéndote loco, o lastimándote solo cuando ya la mente no está nada bien. ¿Cómo se logra eso? Estando en un mundo de solo 2,70 m x 1,20 m rodeado de paredes, y sin ver a nadie, oyendo ruido de oficiales que pasan sin verlos, principalmente ahora con la pandemia del virus, y sin recibir visitas ni cartas de gente antes escribían. Dentro de mi celda he derramado muchas lágrimas, porque en mi soledad y en la oscuridad que me he encontrado apareció el mejor camino en mi vida, y ese camino se llama Jesús, el ser que se ha convertido en mi amigo y fortaleza, y quien día a día me da la fuerza para seguir, el ser que cuando yo he caído me ha levantado, aun sin yo notarlo, y menos entenderlo. Solo el Señor sabe por qué aún me mantiene en vida a pesar de todo lo que he pasado. Yo no lo sé, pero él sí lo sabe, y por eso bendigo su santo y precioso nombre.