Que nadie más sea ejecutado ni en Texas ni en ningún otro lugar

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Hemos recibido con dolor la noticia de que Quintin Jones fue ejecutado el miércoles 19 de mayo. El perdón de la familia de la víctima y las peticiones enviadas por cientos de miles de personas no han parado la lógica de muerte

No han sido suficientes las miles de peticiones provenientes de todo el mundo, entre las que había muchas recogidas por Sant’Egidio a través de la web, e incluso una declaración realizada en la cadena CBS por la hermana de la víctima que perdonaba a Quintin en nombre de la familia, para detener la máquina de la muerte, la primera ejecución en Texas de 2021, la cuarta de Estados Unidos después de las 3 de las 13 ejecuciones federales ordenadas por la administración Trump antes de que el presidente abandonara la Casa Blanca. La Junta de Indultos, el Tribunal Supremo y el gobernador Abbott rechazaron todas las apelaciones y Quintin Jones, de 41 años y que ha pasado 20 en el corredor de la muerte, fue ejecutado en la sala de ejecuciones de Huntsville.
Fueron muy emocionantes las palabras que pronunció Quintin antes de ser ejecutado: «Amo a todos mis amigos y la amistad que me han dado. Para mí han sido como el cielo. Son una parte de la vida, como un gran plato de alimento para el alma. Espero haber dejado a cada uno de ellos un plato lleno de recuerdos felices».
También son emocionantes las palabras de Quintin en la videoentrevista de hace unos días, que se puede escuchar en https://youtu.be/NOJzyvOrh8I, donde reconoce que asesinó a su tía abuela en 1999 por 30 dólares, cuando consumía droga, pero añade: «Ya no soy aquella persona, en el corredor de la muerte me he hecho un hombre. Por eso, si me matáis, mataréis el hombre en el que me he convertido, y no aquel muchacho que era». Y luego, dirigiéndose directamente al gobernador, le pide que le salve la vida y dice: «Si usted lograra encontrar en su corazón (el espacio) para concederme clemencia, yo podría seguir mejorando». Damos las gracias a todos los que se han sumado a nuestra petición para detener esta práctica inhumana y salvar así la vida de Quintin.  La lucha continúa, para que nadie más sea ejecutado ni en Texas ni en ningún otro lugar.
Su historia

Quintin Jones, estaba condenado a muerte en Texas por el atraco y el asesinato de su tía abuela, Berthena Bryant. Desde entonces han pasado veinte años y Quintin, que ahora tenía 42, se ha arrepentido del crimen que cometió cuando era un toxicodependiente resentido de 20 años. La hermana y el sobrino de la señora Bryant, tía abuela y hermano gemelo de Quintin, lo perdonaron y pedían al Estado de Texas que no les hiciera pasar el gran dolor de su ejecución.

CBS News ha entrevistado a Mattie Long, la hermana de la víctima Berthena Bryant, que ha pedido clemencia por Quintin enviando una petición al Gobernador Abbott
Mira el vídeo (inglés)

El New York Times ha dedicado un reportaje especial en su web a Quintin Jones, con una entrevista desde la cárcel
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